SANTIAGO TANGAMANDAPIO, MICH.- La flor de cempasúchil es autóctona de México, una flor aromática de tonalidad amarilla o naranja, que es parte de la identidad del país, representativa en el Día de Muertos, los pétalos eran para los antiguos mexicas, como el sol, quien adornaba las tumbas, bajo la creencia que éstas guardaban la tibieza del día y su aroma guiaba a los muertos.
La flor es una planta conocida como tagete, clavel chino o clavelón de la India. En México, se la llama flor de los muertos o cempaxóchitl. Su nombre científico es Tagetes erecta. La palabra “cempasúchil”, como tal, proviene del náhuatl y significa veinte flor o flor de veinte pétalos.
Es en la localidad de Santiago, Tangamandapio, que José González Sandoval desde hace tres años siembra el cempasúchil, alrededor de 4 hectáreas se producen en el municipio, a pesar de que es una flor que se comercializa durante esta temporada fuertemente, por la colocación de altares así como las vistas al panteón, su venta se acaba el día 2 de noviembre, al volver perdida toda la que no puede comercializarse.
Por lo que productores deben “acomodarla” durante su plantación al buscar quienes la desean, y dejar a la venta ramos para las personas que gustan de esta flor de color naranja o amarilla según la variedad que deseen, para que puedan llevarla a sus fieles difuntos.
Estos son negocios familiares donde todos deben participar, pues es poca la ganancia, por todos los implementos que requiere desde su plantación hasta que florece, además se enfrentan al problema de los roedores quienes están cerca y las consumen como un delicioso alimento para ellos.
En el caso concreto de Tangamandapio, parte de esta producción será para el Festival del Cempasúchil que tiene como finalidad además de ofrecer una celebración a la población, estimular que más personas puedan sembrarla y generar una derrama económica entre su población. El corte de la flor se dará en esta zona los días 29 y 30 de octubre para que llegue fresca y lo más grande posible a las personas.
En México, la flor de cempasúchil se utiliza como parte de la decoración para la ofrenda el Día de Muertos y la velación de los mismos el 1 de noviembre; sus pétalos marcan el camino a seguir las almas de los difuntos hacia los altares domésticos levantados en su honor.
Hay 30 variedades de cempasúchil, de acuerdo con el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas. Entre las que destacan son: tagetes erecta, que es la más común; tagetes patula, que tiene las puntas amarillas y el centro anaranjado; tagetes lunulata y tagetes tenuifolia, entre otras.
La celebración del Día de Muertos no podría ser posible sin esta flor emblemática e indispensable que enmarca con su color y aroma único los altares, uno de los símbolos más fuertes de la identidad de México, la cual ha trascendido a nivel internacional.