•Malos tratos y exigencia de dádivas para realizar trámites, parte de lo que señala la población
Zamora, Mich. – Anomalías que van desde cobros por interponer una denuncia, para liberar cadáveres del SEMEFO, hasta exclusividades para prestadores de servicios funerarios, malos tratos, son parte de las quejas que ciudadanos han realizado a este medio informativo contra personal de la Fiscalía General de Justicia en el Estado de Michoacán de Ocampo sede Zamora, donde las ‘dadivas pecuniarias’ no son siempre voluntarias.
En reciente fecha una persona que logró recuperar la placa de su auto a través de la colaboración de un tercero que la localizó y lo público en Informativo Zamora, señaló a este medio que cuando fue a interponer una denuncia por el ‘robo/ pérdida’ de su laminilla, personal de las agencias le solicitó el pago para realizar dicho trámite, que es gratuito, sin expedir recibo alguno.
Aunque dicha situación es grave, lo es igual el ‘monopolio irregular’ que mantiene una empresa funeraria como exclusiva para ‘recomendar’ a los deudos de personas que fallecen en accidente, hecho violento u otro que amerite un levantamiento y necropsia, tras la cual se les indica que para entregar el cuerpo de su familiar deben contratar a ‘X’ funeraria.
Empresarios funerarios indican que a ellos no se les permite el paso a las instalaciones de la FGJE en Zamora, en tanto que a la funeraria que sí tiene convenio se le permite estar dentro para ‘ofrecer sus servicios’, fomentando una competencia irregular y coaccionada.
Aunado a esta situación se cuenta con las quejas de agricultores y empresarios locales y regionales, quienes indican lo difícil de interponer denuncias, pues las peticiones de recursos y la falta de un trabajo real de investigación da pie a la continuidad de la comisión de delitos como robo, amenazas, extorsión, secuestro, robo a mano armada, entre otros.
En fechas recientes el agricultor José Hernández, indicó que las autoridades muestran la inoperancia en lo referente a la estabilidad de la región, donde las tomas carreteras, los robos, extorsiones y amenazas son una constante para los empresarios de la actividad primaria.